Aunque San Fulgencio y Santa Florentina son los patronos de nuestra diócesis, no nacieron ni vivieron en ella, pues junto con sus hermanos San Isidoro y San Leandro nacieron en Cartagena.
San Fulgencio fue obispo de la antigua diócesis de Écija, y su hermana monja en un monasterio de la misma ciudad.
La razón del patronato sobre la diócesis de Plasencia está en que sus reliquias, ocultadas por los cristianos de Sevilla que huían en el siglo VII de la invasiones musulmanas, fueron descubiertas en Berzocana, localidad perteneciente a nuestra diócesis, en el siglo XIII. El fervor que se despertó el hallazgo fue tal, que los obispos de Plasencia consideraron siempre este hecho como providencia del cielo y declararon a ambos hermanos patronos de la diócesis.
El su honor la real villa de Berzocana erigió una hermosísima iglesia parroquial, y celebra varias fiestas a lo largo del año; la mas concurrida y típica es la que se celebra en el mes de agosto. En la del día 16 de enero las reliquias de ambos hermanos son procesionadas solemnemente, y en su honor se celebra la Santa Misa.
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