El centenario de la marcha al cielo de estos entrañables niños santos, nos esta sirviendo en la catequesis para recordar el mensaje que recibieron de la "blanca Señora", y que ellos fueron los primeros en llevar a la practica.
En la primera de las catequesis sobre estos niños, Francisco nos ha hablado de su "Jesús escondido" (así llamaba a Jesús Eucaristía), su contemplación ante el sagrario, su reparación a Dios, triste por los que rechazan su amor, el respeto a la naturaleza, obra del creador...
En el transcurso de la catequesis se bendijo un cuadro con la imagen de los pastorcitos, que será colocado en el salón de actos, donde normalmente comienza siempre la primera parte de la catequesis que imparte el párroco, con todos los grupos juntos, para que así, teniéndoles presentes visualmente, les conozcan y les imiten.
Cantemos alegres, a una sola voz,
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